Hermosillo, Sonora; 13 de febrero de 2025.- Para debatir,
revisar, promover e integrar una agenda legislativa relativa a la equidad e
igualdad de género, así como para prevenir y erradicar toda forma de
discriminación y violencia hacia las mujeres, este jueves fue aprobado por el
Pleno del Congreso del Estado la convocatoria para el séptimo Parlamento de las
Mujeres.
La diputada de Morena, Ernestina Castro Valenzuela,
presidenta de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política (CRICP)
dio lectura a la iniciativa señalando que “este proceso de participación, al
igual que todos los ejercicios de Parlamento Abierto que habrán de impulsarse
por este Poder Legislativo, tiene como característica fundamental la
participación de las sonorenses como protagonistas, destinatarias y
beneficiarias del trabajo legislativo. Tomando en cuenta que los motivos de las
mujeres se encuentran en sus vivencias de género, es imprescindible
convocarlas, para que, desde su expertise, su experiencia de vida y desde la
diversidad de ideas, construyamos el Sonora que queremos para las mujeres”.
Explicó que los temas a tratar son: Sistemas de autocuidados
de la mujer y edadismo; Acceso de las mujeres a una salud sexual y
reproductiva; Acceso a una educación y prevención de la trata de niñas y
jóvenes en medios digitales; y Desarrollo económico y emprendimiento con
perspectiva de género.
Ejes temáticos de la edición 2025
Parlamento de las Mujeres:
-Sistema de Autocuidados de la Mujer y Edadismo. -Acceso de las Mujeres a la Salud Sexual y Reproductiva. -Acceso a una Educación y Prevención de la Trata de niñas y jóvenes en medios digitales. -Desarrollo Económico y Emprendimiento con Perspectiva de Género.
Castro Valenzuela detalló que los requisitos para participar
son: ser mujer mayor de 18 años; ser originaria o contar con residencia
efectiva en el estado de Sonora; remitir una ponencia sobre los ejes temáticos
del parlamento, así como presentar una ponencia por escrito en formato Word o
PDF, con una extensión de hasta cinco páginas, con letra Arial 12, interlineado
1.5 y margen de páginas normal. La ponencia deberá representar un aporte a las
actividades legislativas o de abordaje de temas de relevancia en materia de
género.
Las ponencias verificadas serán expuestas ante las mesas de
trabajo el día viernes 7 de marzo, de las cuales se integrará una por cada eje
temático del parlamento, las cuales contarán con una persona coordinadora de la
mesa, quien dará orden a las participaciones, y una persona relatora de la
mesa, quien integrará las participaciones. La relatora de la mesa integrará los
resultados de lo expuesto en esta, que se llevará a la plenaria por una oradora
elegida por las participantes de la mesa.
Las propuestas se recibirán del 12 al 28 de febrero, en
formato electrónico, a través del correo:
parlamento.mujeres@congresoson.gob.mx; o en la Oficialía de Partes del Congreso
de Sonora, de 8:00 a 15:00 horas.
El titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de
Sonora, Luis Fernando Rentería Barragán,
rindió este 7 de febrero de 2025 su informe anual de actividades ante la
Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de Sonora.
Foto: Congreso del Estado de Sonora
Además de un desempeño sobresaliente de la institución, el
presidente de la CEDH hizo énfasis en cómo ha logrado con menos recursos hacer
mucho más de lo que hicieran en todos los años de existencia de la CEDH las
anteriores administraciones.
Y es verdad, basta revisar los informes con los documentos
concretos que se encuentran públicos, para darse cuenta que su rendimiento ha
sido el más destacado en toda la historia de la CEDH.
Más aún, las recomendaciones, medidas cautelares, opiniones
consultivas y otras figuras que corresponde emitir a la institución, fueron
“estrenadas” en Sonora, como lo dijo en alguna ocasión él mismo, ya que, salvo
algunas recomendaciones, ningún presidente de la CEDH se había atrevido, o no
había sabido hacerlas.
En la sesión de exposición y entrega del informe, la
diputada Claudia Zulema Bours Corral,
Secretaria de la Comisión de Justicia y Derechos Humanos, cuestionó al
ombudsperson sobre el caso de las cinco ex empleadas que lo denunciaron ante el
poder legislativo por acoso laboral, maltrato y otras situaciones generadas,
según las denunciantes, por el actual titular de la CEDH.
Son cinco mujeres quienes firmaron el escrito que puso al descubierto algunas irregularidades que ocurren en la CEDH, y quienes
responsabilizan al titular como quien las ha provocado. Decir irregularidades
es un eufemismo que abarca la descripción de las conductas que éste tuvo para
con ellas y su trabajo dentro de la Comisión, según sus propias palabras.
Sin embargo, Rentería Barragán no sólo no ha dado respuesta
puntual a los requerimientos de las quejosas, sino que ha tomado la acción como
una sublevación hacia su administración, que hubiera sido perfecta de no ser
por la rotación de personal tan frecuente, y las razones que las demandantes
aducen para haberse separado de su puesto en la CEDH.
En cambio, el ombudsperson -como lo hace un niño-, en lugar
de enfrentar y responder profesionalmente a cada uno de los puntos que ellas
dieron a conocer tanto a la sociedad en general, como a la Comisión de Justicia
y Derechos Humanos de la LXIII legislatura, se dedicó a responder con lo que él
ve como “defectos” o carencias para que cada una de ellas “mereciera” el trato
y en todo caso la renuncia voluntaria, o la no renovación de su contrato
laboral.
Es decir, lo que debió ser una magnánima exposición de su
parte de cuáles son los caminos que el diálogo entre la CEDH y las ex empleadas
seguirán para dirimir el conflicto, y sobre todo, la ruta que éstas tendrían
qué recorrer para encontrar el respeto a sus derechos humanos laborales, como
se lo cuestionaba la diputada Bours Corral, sus respuestas fueron enfocadas a
desacreditar la trayectoria de las mujeres.
Es una lástima que el primer titular de la CEDH que ha
tenido Sonora, con verdadera formación académica y experiencia para defender y
procurar el respeto a los derechos humanos en el que confiamos, justo en un
caso interno, no tenga una respuesta.
Foto: Congreso del Estado de Sonora
Una y otra vez la legisladora Secretaria de la Comisión de
Justicia y Derechos Humanos preguntaba cuál era la instancia donde las ex
empleadas de la CEDH que denunciaron mal trato del presidente de la Comisión
cuando laboraron ahí, deberían de acudir para denunciar lo que consideran
violaciones a sus derechos humanos laborales, no tuvo respuesta.
Por el contrario, se dedicó a resumir su análisis del perfil
y desempeño de cada una de ellas, utilizando información privilegiada interna
de la Comisión, para desautorizar sus dichos, como si eso nulificara el derecho
que ellas tienen a buscar una respuesta, para lograr como ellas han dicho, que
no se repita.
Haciendo la analogía, sería como si familiares de personas
desaparecidas llegaran a la CEDH a presentar una queja, y al final en lugar de
hacer la investigación y en su caso, emitir una recomendación y/o una medida
cautelar, la Comisión dedicara su tiempo a perfilar a las personas
desaparecidas, para ver si se merecían o no ser víctimas de desaparición.
No se entiende esa falla del titular de la CEDH, quien se
había mantenido incólume incluso ante decisiones que provocaron movilización de
sectores que si bien, no son numerosos, sí son parte de quienes detentan el
poder económico y político.
Nos decepciona que, teniendo los elementos para guiar el
caso por una ruta que seguramente ha recorrido una y otra vez antes de emitir
una resolución, cuando de otras personas se trata, en su propio contexto no
puede resolverlo por la vía del diálogo.
Lo grave es que acude a revelar datos personales de las
mujeres, a los que tiene acceso por su situación de poseedor de la información completa
de toda la planta de empleadas y empleados.
Si bien es cierto que al referirse a cada una exponiendo lo
que él considera las características negativas que llevaron a que finalmente
éstas se separaran de su puesto, no mencionaba sus nombres, éstos se han hecho
públicos, con puesto y cada experiencia adversa que describen, es muy fácil
inferir a quién se refiere con cada alusión a las “deficiencias”, incluso a una
de ellas, le adjudica posible corrupción, sólo porque a él le parece.
Y no, ellas no están solicitando la reinstalación, ni una indemización
distinta a lo que pudieron haber recibido por su renuncia. Así que, la
instancia no es el Centro de conciliación laboral, ni alguna otra autoridad
laboral para dirimir la controversia, porque el asunto no es estrictamente
laboral, aún que se haya presentado en el contexto de las relaciones laborales.
Por ello la sugerencia del presidente de la CEDH, secundado por el presidente
de la Comisión de Justicia y Derechos Humanos está fuera de lugar.
Más allá de que toda la información vertida por el ombudsperson
sobre cada una de las mujeres denunciantes es totalmente irrelevante para dar
respuesta a cada una de las quejas de maltrato laboral, acoso, etc., la
actitud muestra una salida desesperada, no meditada, que abona a que se
fortalezca la hipótesis de que pudiera ser verídica la versión de las mujeres
de que su postura constante es un tanto misógina pues, sostienen, acostumbra desestimar el trabajo de las
mujeres, según la denuncia.
Necesitamos un titular de la CEDH íntegro, no sólo que hacia
afuera se conduzca con probidad, con atingencia, con conocimiento profundo de
los derechos humanos, sino que ponga el ejemplo desde su propia sede.
A la sociedad no nos interesa saber si las ex empleadas no
cuentan con una calificación para el puesto, ya que, en todo caso, él mismo las
contrató bajo esas supuestas circunstancias. A la sociedad le interesa saber
que puede confiar en su ombudsperson cuando siente vulnerados sus derechos
humanos, para todos y todas, incluso para las y los empleados de la CEDH. Esa
sería la mejor muestra de que podemos confiar.
El titular de la CEDH reprobó en capacidad de negociación,
pero no es el único. Las y los diputados que no incluyeron en su entrevista con
motivo del informe anual el seguimiento a este caso que puede convertirse en
emblemático, ya que, el propio presidente de la Comisión de Justicia y Derechos
Humanos, impidió que se diera una respuesta congruente, al manifestar que “no
era el tema”.
Video tomado de la transmisión del Congreso del Estado de Sonora
Las demandas de las ex empleadas de la CEDH quedaron plasmadas en el siguiente
COMUNICADO:
Extrabajadoras de la
CEDH exigimos a Congreso del Estado revisar denuncias contra Luis Fernando
Rentería Barragán
A través de una carta dirigida y entregada hoy a las
diputadas y diputados de la LXIV Legislatura del Congreso del Estado de Sonora,
un grupo de mujeres ex empleadas de la CEDH hemos exigido la revisión
exhaustiva de diversas denuncias y quejas presentadas desde hace más de un año
ante el Órgano Interno de Control (OIC) de la CEDH en contra de su presidente,
Luis Fernando Rentería Barragán, por diferentes conductas constituidas como
violencia de género en contra de las mujeres de dicha institución, como hostigamiento
sexual, hostigamiento laboral, discriminación, entre otras.
“Como es de su conocimiento, la violencia de género es un
problema grave que afecta a muchas mujeres en el ámbito laboral, y es
fundamental que las autoridades responsables tomen medidas eficaces para
erradicarla, asegurando la justicia y la protección de los derechos humanos de
todas las personas afectadas evitando la revictimización y la violencia
institucional señalada en nuestra Ley Estatal de Acceso a las Mujeres a Una
Vida Libre de Violencia”, se expresa en el documento que también fue puesto en
conocimiento a las Comisiones de Justicia y Derechos Humanos; para la Igualdad
de Género, Atención a Grupos Vulnerables de la Sociedad y de Asuntos del
Trabajo y a personas integrantes del Consejo Consultivo de la CEDH, Consejo
Ciudadano para Prevenir la Discriminación y el propio OIC.
En dicha misiva se destaca que a pesar de que las denuncias
han sido reiteradas desde hace más de un año, el OIC ha sido omiso en su
seguimiento y resolución, lo que ha propiciado que la violencia continúe y se
agrave. En este sentido, se exige que se inicie un análisis serio de dichas
denuncias y que se impulsen las acciones correspondientes para que no exista
impunidad ni se revictimice a las personas afectadas. Además, se solicita que
se les brinde acompañamiento adecuado a las víctimas, y que haya garantía de no
repetición para el personal que aún labora dentro de la institución,
particularmente mujeres.
Las denuncias presentadas ante el OIC de la CEDH incluyen
testimonios y pruebas de hostigamiento laboral, hostigamiento sexual y otros
tipos de violencia de género, ejercidas por el presidente de la Comisión
Estatal de Derechos Humanos, Luis Fernando Rentería Barragán, un reflejo de lo
denunciado en la anterior legislatura durante la comparecencia del C. Rentería
Barragán ante la Comisión de Justicia y Derechos Humanos el 12 de septiembre de
2022, sobre la violencia ejercida hacia la titular del OIC.
Asimismo, se ha solicitado se brinde a las empleadas de la
CEDH Sonora, un espacio seguro y accesible donde puedan presentar sus denuncias
sin temor a represalias, y que se promuevan políticas internas que garanticen
un ambiente laboral libre de violencia y discriminación como la implementación
de un Protocolo de Hostigamiento y Acoso Sexual que incluya también medidas
contra directivos.
La carta está firmada por Leyla Acedo Ung, ex Secretaría
Ejecutiva; Erica Salinas Castillo, ex Directora de Derechos Sexuales y
Reproductivos; María Luisa Alatorre Castañeda, ex Directora de Derechos
Sexuales y Reproductivos; Alejandra Olay Rodríguez, ex Directora de
Comunicación Social y Michelle Félix Velarde, ex Coordinadora de Redes y
Medios;también nos manifestamos en
nombre de las mujeres que de igual forma han sido víctimas de las violencias
denunciadas y que por diversos motivos han optado por mantenerse en el
anonimato.